Qué bueno y qué rico está todo!
Agosto tiene a parte del calor, otras cosas buenas…y es que a los que somos o vivimos aquí todo el año, esta frase nos suena muchísimo: «Qué rico está todo!» porque la huerta ibicenca es rica y variada.
No es difícil ni caro encontrar un sitio de estos que ahora están tan de moda, «ecológicos», y encontrar material de cualquier payés y conseguir tomates con sabor a tomates, huevos frescos que no llevan la fecha de caducidad escrita en la cáscara o melones dulces llenos de tierra todavía.
Sandias, melones, acelgas, berenjenas, lechugas, pimientos, tomates, patatas e higos se pueden añadir a la oferta de pescado fresco de aquí.
Por parte de instituciones se están promocionando estos productos desde hace ya años : #PeixNostrum y #Compraenpetit son las dos campañas principales a las que se ha unido estos días #viulaPosidònia en la que 20 restaurantes se han unido para ofrecer este alga y lo que nace, crece y vive en ella , en la carta de sus establecimientos.
Porque la frase : «qué rico está todo» o «qué bueno está todo»…»qué sabor tiene!» …es una frase que en Ibiza y Formentera oímos todos muy a menudo.
Por nuestro trabajo y por vivir donde vivimos tenemos la oportunidad de conocer mucha gente, diferentes culturas y diferentes maneras de ver, hacer, comer…de vivir.
Hemos hecho buenos amigos alrededor de una mesa, donde más se disfruta de la gente. Donde todo el mundo se relaja y se puede charlar con tranquilidad, donde la inmensa mayoría nos mostramos tal y como somos.
Disfrutamos de una buena sobremesa de la misma manera que disfrutamos de una puesta de sol, o de un calamar que pescamos ayer por la noche. Y te prometo, que muchos esperamos a que nos digáis la frase.
Se ve mucho la diferencia entre la gente de pueblo que está acostumbrada y da por hecho que las frutas y verduras tienen su propio y auténtico sabor, y la cara de los que sois de ciudad cuando coméis algo fresco.
Hay una frase que es de una película española “El disputado voto del señor Cayo”, adaptación de un libro de Delibes en la que sale Paco Rabal, y que hace tiempo que convertí en una de mis máximas:
“La gente de pueblo puede vivir sin la gente de ciudad, pero la gente de ciudad no puede vivir sin la gente de pueblo.”
Queremos con estas 4 líneas dar las gracias a esos amigos payeses, a esa señora que nos vende huevos, a ese tienda de carretera que vende tomates de aquí, a los mercados de los diferentes pueblos, a los mercados payeses que se van celebrando puntualmente en diferentes lugares de la geografía ibicenca, a los pescadores y pescateros que nos venden el #peixnostrum y que nos se nos olvide, a toda esa gente que tiene un pequeño negocio y que nos hace de intermediarios, al pequeño comercio también. Gracias.
#Compraenpetit